Gran Hermano 14: Miriam, expulsada, entiende a Miguel: «Me dijo que no le respeté y a lo mejor es verdad»

La Nube / 9 abril 2013

Con un 42,9% de los votos, Miriam se convertía en la octava expulsada de ‘Gran Hermano catorce’. A su llegada a plató, Mercedes Milá le confirmaba que su novio, Miguel, ha cancelado la boda tras ver su actitud con Igor pero ella negaba que haya tenido relaciones íntimas con su compañero durante el concurso. Entonces, Miriam vio un vídeo de Igor que le hizo cambiar la opinión que tenía de él. Por ello, no pronunció en su despedida los ‘te quieros’ que le dijo cuando se marchaba de la casa, dándole pistas de lo que fuera había visto.

Los gemelos Montoya, Igor y Miriam fueron los elegidos por los familiares para enfrentarse a la decisión de la audiencia. Los familiares criticaban la actitud de Igor con Miriam y viceveresa, dado que ella tiene pareja y él quiere retomar la relación con su ex mujer. Antes de ser nominados, los concursantes pudieron hablar con sus familiares, Miriam eligió a su madre, quien le advirtió que, si quería a Miguel, su pareja, debería cambiar su actitud. Días después, Miriam pudo hablar con Miguel, que se mostraba dolido: » Me has demostrado que no eres la mujer de mi vida» , le decía; Miriam reiteraba que le quería, negaba que hubiera sucedido nada con Igor, pero Miguel repetía que, aunque tenían que hablar cuando ella fuera expulsada, ya sabe «de qué va la cosa».

Días después, se enfrentaban a la expulsión. Cogidos de la mano, Igor y Miriam veían cómo los gemelos Montoya eran los primeros salvados. Tras unos minutos, afrontaban la decisión de la audiencia, la suerte estaba echada y, finalmente, Mercedes Milá pronunciaba el nombre del expulsado: Miriam.

«Te quiero», le susurraba Miriam a Igor al oído. Los concursantes se mandaban mensajes mutuos, Igor le tranquilizaba diciéndole que la gente le querría fuera y lo conversación transcurría entre ‘Te quieros’, ‘lo siento’, abrazos y muchos besos. Igor le pedía que fuera explicara lo sucedido: » Intenta arreglar las cosas, haz lo que te he dicho» y Miriam asentía. Ella le daba mensajes de cariño para los compañeros que se quedaban en la casa, y él para su familia fuera, también para su mujer: «Si le puedes decir algo a Ainara se lo dices (…) Dile a mi familia que les quiero mucho, a mi madre, a Ainara, que les quiero un montón». Miriam continuaba asintiendo: «estate tranquilo, intenta estar bien».

Y el Súper anunció que había llegado la hora de la despedida. Se decían adiós con un «pórtate bien» de Miriam y, minutos después, Mercedes Milá le recibía en plató.