Obama y los republicanos siguen negociando pero el acuerdo parece cada vez más lejos

/ 11 octubre 2013

El presidente de EEUU, Barack Obama, acusó ayer a los republicanos de destruir la economía del país por su obsesión por acabar con la ley de sanidad, e insto a sus líderes en el Congreso a aprobar un presupuesto «sin condiciones partidistas».

Barack Obama (Foto: Casa Blanca)

Barack Obama (Foto: Casa Blanca)

Obama se reunió con una veintena de negociadores republicanos de la Cámara Baja, que le ofrecieron un plan para elevar durante un plazo corto, seis semanas, el techo de la deuda nacional. Desde la Casa Blanca se indicó que «tras una discusión sobre posibles caminos hacia delante, no se tomó una determinación específica».

El líder de la mayoría republicana en la Cámara de Representantes, Eric Cantor, dijo a los periodistas que la reunión fue «útil», y que ambas partes acordaron «continuar las discusiones». Horas antes, el líder de la mayoría demócrata del Senado, Harry Reid, aclaró que su grupo no va a negociar con los republicanos mientras continúe el cierre del Gobierno.

Mientras, el FMI pidió ayer a EEUU que solucione con celeridad el problema de la deuda, y aunque valoró positivamente la propuesta republicana de elevar su techo seis semanas, aseguró que una propuesta a más largo plazo sería «mucho mejor».

 


(Texto de elaboración propia realizado a partir del resumen de noticias de los servicios de prensa de Moncloa)

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