El ex secretario general del PP y ex ministro de Fomento Francisco Álvarez-Cascos rechazó ayer en el juicio del caso Gürtel que su partido cobrara comisiones a empresarios de la construcción a cambio de conseguirles contratos públicos, así como que pagara sobresueldos a miembros del partido.
Cascos calificó de «inverosímil» la versión dada por el cabecilla de la trama, Francisco Correa, e insistió en que en el Ministerio de Fomento de su época «eran imposibles los tratos de favor». Según explicó, cuando llegó al Ministerio cambió los pliegos de condiciones para adjudicar contratos y modificó el sistema de apertura de sobre por lo que era «imposible la manipulación». Cascos insistió en que durante sus años en Fomento «jamás» recibió «ninguna llamada ni indicación» del extesorero del PP Álvaro Lapuerta ni de su entonces subordinado, Luis Bárcenas, relacionada con adjudicaciones de concurso. Asimismo, negó haber recibido dinero en efectivo al margen de su sueldo en el partido.
Hoy está previsto que declaren como testigos los exsecretarios generales del PP Javier Arenas y Ángel Acebes, y los exministros Rodrigo Rato y Jaime Mayor Oreja.
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(Texto de elaboración propia realizado a partir del resumen de noticias de los servicios de prensa de Moncloa)