El Gobierno deja claro que no negociará ni cederá en nada de cara a la consulta soberanista

La Nube / 14 diciembre 2013

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, reiteró ayer que «no hay nada que discutir ni que negociar» respecto a la consulta soberanista anunciada ayer por el Ejecutivo catalán.

Soraya Sáenz de Santamaría, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros (Foto Moncloa)

Preguntada sobre este asunto en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la vicepresidenta dijo que los contactos que se produzcan serán para que los catalanes «se vean lo menos perjudicados posible por un proceso» que, según dijo, va a «fracturar la sociedad, alentar la división y generar entre los ciudadanos una sensación de incertidumbre».

Sáenz de Santamaría insistió en que la consulta es inconstitucional, en tanto, explicó, corresponde a todos los españoles «decir cómo se organiza España territorialmente», por lo que, añadió, «no forma parte de la capacidad de negociación» del Gobierno. En cualquier caso, la vicepresidenta, que apeló al respeto a la ley, especialmente por parte de los políticos, dijo que el Ejecutivo seguirá trabajando para fortalecer «los lazos económicos, sociales, políticos y afectivos de los catalanes con el resto de los españoles».

Preguntada acerca de la aportación de más de 800 millones por parte del Estado a Cataluña a través del FLA, Sáenz de Santamaría respondió que hay comunidades que tienen cerrados los mercados y por ello el Ejecutivo está «supliendo» sus necesidades de financiación. Asimismo, señaló que el Gobierno «está para que todos los españoles, incluidos los catalanes, puedan seguir recibiendo servicios públicos o cobrar las nóminas», al tiempo que recalcó que esas ayudas son préstamos que tendrán que devolver. La vicepresidenta recordó que hay cinco comunidades que no cumplieron con el déficit en 2012, que tienen problemas de financiación, entre ellas Cataluña.

Por otra parte, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante el acto de investidura como doctor Honoris Causa en la Universidad San Pablo CEU del presidente del Consejo de la UE, Herman Van Rompuy, defendió «la identidad múltiple de ser europeo», frente a aquellos, que, dijo, tienen una visión excluyente de las identidades del ser humano». Por su parte, Van Rompuy dijo confiar en que «una España unida siga jugando el mismo papel» en la UE.

Por otro lado, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, dijo ayer que los españoles deben estar tranquilos porque el PP va a defender las leyes y «no va a permitir que nadie rompa nuestro país». Cospedal explicó que la unidad de España es «incuestionable» y que tanto el Gobierno como su partido van a defender tanto el pasado común de los españoles como el presente y el futuro de la nación. Pidió, además, a todos los partidos, y especialmente al PSOE, que tengan una postura clara y contundente en toda España sobre este asunto.

También el portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, dijo que va a tener un «efecto no deseado» por los nacionalistas, y que va a reforzarse la unidad de los españoles, según explicó, y de las fuerzas políticas en defensa de la nación y de los valores constitucionales.

Por otra parte, la presidenta del PP de Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho, acusó al presidente de la Generalitat de actuar al margen de la ley y de causar una «fractura social» en Cataluña. Sánchez-Camacho, insistió en que «la consulta es ilegal porque es inconstitucional», por lo que «no se hará», dijo, Para la líder del PP catalán, «el Gobierno ha actuado con toda la contundencia y firmeza posibles y emplazó a Mas a trasladar la petición de celebrar el referéndum al Congreso, como en su día hizo el lehendakari Juan José Ibarretxe, y una vez debatido y votado su plan, acepte las leyes y los resultados democráticos.

Ya lo dijo Rajoy:

(Texto de elaboración propia realizado a partir del resumen de noticias de los servicios de prensa de Moncloa)