El tiempo hoy, miércoles 15 de abril de 2020

/ 15 abril 2020

En la mayor parte de la Península y en el área mediterránea se esperan cielos nubosos con lluvias, chubascos y ocasionales tormentas con granizo. En la cordillera Cantábrica, Sistema Central, Andalucía occidental, Málaga, y en el área de Levante podrían ser fuertes o persistentes. En el entorno de Aragón, Cataluña y alto Ebro se producirán la segunda mitad del día principalmente y en general serán más débiles y ocasionales; en el litoral Cantábrico serán poco probables, así como en Baleares donde podrán ir acompañadas de barro. En Canarias hay posibilidad de lluvias en las islas de más relieve.

Temperaturas diurnas en ascenso en el litoral cantábrico; pocos cambios o en ascenso en alto Ebro, Ceuta, Melilla y archipiélagos; en descenso en el resto del país; las mínimas, en ascenso en la mayor parte de la Península.

Vientos con predominio de la componente sur en la Península y de componentes este y norte en el área mediterránea; rachas fuertes en zonas altas del Cantábrico, Pirineos y sistema Central. En Canarias, variables con predominio del oeste.

Fenómenos significativos

Probables precipitaciones fuertes y/o persistentes en la cordillera Cantábrica, el Sistema Central, Andalucía, y en el área de Levante. Rachas fuertes de viento en zonas altas del Cantábrico, Pirineos y en el sistema Central.

Todo sobre el Pronóstico del tiempo

Es la aplicación de tecnología y de ciencia para predecir el estado de la atmósfera para un período futuro y una localidad o región dada. La historia del pronóstico del tiempo es milenaria, aunque los paradigmas y las técnicas usadas han cambiado significativamente. Los pronósticos se hacen colectando tantos datos como sea posible acerca del estado de la atmósfera (particularmente temperatura, presión atmosférica, vientos, humedad y precipitaciones) y usando conocidos procesos atmosféricos (a través de la meteorología) para determinar los patrones futuros atmosféricos. Sin embargo, la naturaleza compleja de los fenómenos atmosféricos y el entendimiento incompleto de los patrones y procesos meteorológicos hacen que los pronósticos sean menos seguros al incrementarse el rango temporal del pronóstico.

Las dos personalidades que más acreditaron el nacimiento del pronóstico como ciencia fueron Francis Beaufort (recordado por la escala Beaufort) y su protegido Robert Fitzroy (desarrollador del barómetro Fitzroy). Ambos eran influyentes en la Naval Británica y en los círculos gubernamentales, y fueron ridiculizados por la prensa, aunque sus trabajos ganaron fuerza académica, y fueron aceptados por la Armada Británica, formando la base del conocimiento actual del pronóstico del tiempo. (Fuente: Wikipedia)

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